Medicamentos antiepilépticos

¿Qué deberíamos saber?

Los medicamentos antiepilépticos son aquellos orientados a interrumpir o evitar las convulsiones que se producen durante las crisis epilépticas.

Durante estas crisis se producen movimientos anormales del cuerpo o cambios de comportamiento de la persona con o sin pérdida de la conciencia que pueden tener complicaciones graves.

Existen muchos tipos de medicamentos antiepilépticos, cada uno con sus indicaciones, contraindicaciones y efectos adversos particulares.

Los fármacos antiepilépticos suelen tener numerosos efectos secundarios, aunque no suelen ser graves. Los más frecuentes son: sueño, mareo, dolor de cabeza, fatiga, cambios en el estado de ánimo, entre otros.

¿Cómo se escoge el medicamento antiepiléptico a utilizar?

Los fármacos antiepilépticos suelen recetarse a partir de sufrir un segundo ataque convulsivo y el tratamiento suele prolongarse a largo plazo (durante años) con una dosis diaria.

Lo ideal es utilizar un solo fármaco en la dosis mínima en la cual se vea un efecto adecuado sin llegar a niveles de toxicidad.

Por ello, con casi todos los medicamentos se hace un seguimiento con exámenes de sangre en donde se miden los niveles del fármaco y se comparan con los estándares que se han visto que mantienen las crisis epilépticas controladas sin riesgos para la salud.

La elección del fármaco que se va a utilizar se fundamenta principalmente en el tipo de crisis convulsiva que se presente.

Otros factores que se tiene en cuenta son la edad del paciente, la existencia de un síndrome determinado que se sabe que mejora con un medicamento determinado, enfermedades del riñón, el hígado y el corazón que afecten la administración de ciertos fármacos, otras enfermedades físicas y mentales que presente la persona, en mujeres en edad fértil la posibilidad de un embarazo, etc.

Asimismo, existe un tratamiento para la crisis epiléptica en urgencias y otro tratamiento para la epilepsia a largo plazo.

Según la clasificación de las crisis epilépticas, se distinguen los siguientes grupos para decidir el antiepiléptico que se va a utilizar en las convulsiones a largo plazo:

¿Cuáles son las características de los principales medicamentos antiepilépticos?

Los aspectos generales de los fármacos antiepilépticos utilizados en la actualidad se describen a continuación:

• Hidantoínas

  • Fenitoína: Es efectiva en crisis focales y generalizadas tónico-clónicas, pero no en ausencias. También se utiliza para prevenir convulsiones luego de una cirugía de cerebro y en el estado epiléptico (urgencia).

• Benzodiacepinas: Ejemplos: Diazepam, Lorazepam, Clobazam y Clonazepam. Se usan como sedantes y para el tratamiento de la ansiedad, pero están aprobados como antiepilépticos en casos de urgencias como el estado epiléptico y en enfermedades como el síndrome de Lennox-Gastaut y la mioclonía.

• Barbitúricos anticonvulsivos

  • Fenobarbital: El fenobarbital sirve para las convulsiones focales, pero es menos utilizado por su acción sedante.
  • Primidona: Se usa en crisis focales y también produce mucho sueño.

• Iminostilbenes

  • Carbamazepina: La carbamazepina es uno de los antiepilépticos más utilizados para todo tipo de crisis tónicas y tónico-clónicas y también para la neuralgia del trigémino.
  • Oxcarbazepina: Se utiliza en la epilepsia tanto para las convulsiones focales como para las generalizadas. También se utiliza para el trastorno bipolar.
  • Eslicarbazepina: Es eficaz para las epilepsias focales.

• Succinimidas

  • Etosuximida: Son medicamentos utilizados para prevenir la aparición de crisis de ausencia: ataques frecuentes en niños en los que se pierde el conocimiento mientras que parece que la vista se fija en un punto concreto.

• Otros fármacos anticonvulsivos

  • Acetazolamida: Se usa en especial en ausencias.
  • Ácido valproico (Valproato): El ácido valproico sirve tanto en ataques de ausencia como en ataques tónico-clónicos. Es un medicamento ampliamente utilizado. No se aconseja en mujeres con posibilidad de quedar embarazadas, ya que puede producir graves defectos congénitos en el cerebro y la medula espinal del bebé.
  • Cannabidiol: Se utiliza en los Síndromes de Dravet y Lennox-Gastaut.
  • Felbamato: Es un medicamento que se utiliza en casos muy específicos de difícil manejo y puede ser muy tóxico.
  • Fenfluramina: Utilizado en la enfermedad genética llamada síndrome de Dravet.
  • Gabapentina y Pregabalina: La gabapentina se desarrolló originalmente para el tratamiento de la epilepsia, pero se emplea también en el dolor neuropático crónico (neuropatía diabética dolorosa o neuralgia post-herpética). La pregabalina es muy parecida a la gabapentina pero más potente. Se utiliza para el tratamiento del dolor crónico causado por daños en los nervios y como fármaco complementario de otros antiepilépticos para la epilepsia parcial resistente al tratamiento.
  • Lacosamida: Es un medicamento solo disponible en Estados Unidos usado para crisis focales.
  • Lamotrigina: Tiene características semejantes a las de la fenitoína y se usa especialmente para la epilepsia generalizada y el síndrome de Lennox-Gastaut.
  • Levetiracetam y brivaracetam: Por lo general se utilizan en epilepsias de difícil manejo junto con otros medicamentos.
  • Perampanel: Se utiliza como terapia añadida en convulsiones focales.
  • Rufinamida: Se usa en el síndrome de Lennox-Gastaut.
  • Estiripentol: Se usa casi exclusivamente en la epilepsia mioclónica grave en niños llamada síndrome de Dravet cuando no se controla adecuadamente con clobazam y ácido valproico.
  • Tiagabina: Se usa como terapia adicional en crisis focales de difícil manejo.
  • Topiramato y Cenobamato: El topiramato además de para las crisis epilépticas en adultos y niños mayores de 6 años se emplea también para el tratamiento profiláctico de la migraña. Es similar en acción a la fenitoína pero con menos efectos secundarios. Es más útil en crisis focales y síndrome de Lennox-Gastaut.
  • Vigabatrina: Se usa en epilepsias de difícil manejo y espasmos infantiles.
  • Zonisamida: Está indicada en ciertos casos para adultos con epilepsia focal recién diagnosticada o puede añadirse a una terapia ya existente.

¿Cuáles son los antiepilépticos que se utilizan en el estado epiléptico y otras urgencias convulsivas?

Las benzodiacepinas por vía oral, nasal o rectal administradas lo más pronto posible son los medicamentos más recomendados en caso de una urgencia.

En el hospital y cuando las convulsiones se prolongan mucho tiempo, por lo general se combina una benzodiacepina con otro medicamento que puede ser ácido valproico o levetiracetam aunque hay muchos protocolos que pueden variar según el caso.

Si las convulsiones no ceden después de dos medicamentos puede ser necesario anestesiar a la persona y posteriormente estabilizarla en una Unidad de Cuidados Intensivos UCI.

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