¿En qué consiste un frotis sanguíneo?
Un frotis sanguíneo es un examen en el que se observa una gota de sangre al microscopio para detectar anormalidades específicas en la morfología de las células sanguíneas o para hacer un recuento manual de las mismas.
Actualmente los resultados de un análisis de sangre rutinario se obtienen de forma automatizada mediante máquinas llamadas analizadores automáticos.
Sin embargo, existen situaciones donde es preciso realizar un estudio manual por un técnico cualificado:
- Para detectar anormalidades en la morfología (aspecto, color y tamaño) de las células sanguíneas que no pueden ser detectadas por las máquinas automáticas.
- Es recomendable solicitar un recuento manual de las células de la sangre cuando los exámenes automáticos están muy alterados por si hay dudas de que el procedimiento automático haya sido correcto.
El frotis sanguíneo es como una herramienta útil de diagnóstico para diferentes tipos de anemias, linfomas, trombocitopenia y trombocitosis. Además, puede ayudar en el diagnóstico de algunas infecciones bacterianas o por parásitos.
¿Cuál es el procedimiento de realización?
En un frotis o extensión de sangre periférica, una gota de sangre es esparcida en una lámina y observada al microscopio por un profesional entrenado.
Normalmente se utiliza una muestra de sangre capilar, que se obtiene mediante una pequeña punción en la superficie de la piel para recoger una muestra de los pequeños vasos sanguíneos llamados capilares.
En los adultos y niños mayores de un año suele realizarse la punción en la yema del dedo (o en lóbulo de la oreja). En lactantes hasta 1 año y recién nacidos la punción se suele hacer en un dedo del pie o en el talón.
¿Qué alteraciones de la forma y tamaño de las células de la sangre existen?
En este examen, se pueden detectar anormalidades que las máquinas que hacen el análisis estándar no pueden determinar con la precisión del ojo humano.
Además de las alteraciones en la forma y tamaño de los glóbulos rojos (hematíes), también pueden verse inclusiones en su citoplasma. En el frotis también es necesario observar la morfología (aspecto y tamaño) de los leucocitos y las plaquetas, ya que puede ayudar al diagnóstico.
Pueden encontrarse hallazgos en los tres tipos de células principales (glóbulos rojos, glóbulos blancos o plaquetas).
Los glóbulos rojos o hematíes vistos al microscopio tienen normalmente una forma de disco bicóncavo.
Algunos hallazgos anormales son:
- La macrocitosis es el aumento de tamaño de los glóbulos rojos. Es propia del alcoholismo crónico, déficit de ácido fólico o vitamina B12, o enfermedades hepáticas.
- La microcitosis es la disminución de tamaño de los glóbulos rojos. Suele aparecer en caso de anemia ferropénica, talasemia, intoxicación por plomo o déficit de cobre.
- La hipocromía es la palidez de los glóbulos rojos. Suele coincidir con la microcitosis y aparecer en caso de anemia ferropénica, anemia de las enfermedades crónicas, talasemia, intoxicación por plomo o anemia sideroblástica.
- La hipercromía es el aumento de la coloración de los glóbulos rojos y suele aparecer con la macrocitosis debido a defectos de ácido fólico o vitamina B12, enfermedades hepáticas o alcoholismo.
- La esquistocitosis, aparece cuando los hematíes son de diferentes formas (bastones, media luna, en forma de casco, con espinas, etc.). Se suele deber a enfermedades que atacan los hematíes como la anemia hemolítica que aparece en enfermedades autoinmunes.
- La poiquilocitosis es cuando la forma de los hematíes es de lágrima o de pera, aparece en diversas anemias.
- La eliptocitosis son hematíes elípticos que se debe a anemias o a una enfermedad concreta que es la eliptocitosis congénita.
- La drepanocitosis, la forma de los eritrocitos es de hoz, suele deberse a enfermedades congénitas.
- La esferocitosis son glóbulos rojos que alteraron su forma bicóncava por la de una esfera. Es una enfermedad hereditaria que produce la alteración de la forma del eritrocito por el déficit de ciertas sustancias necesarias.
- La presencia de eritroblastos es que aparecen los hematíes con núcleo, y es por la aparición de formas jóvenes recién salidas de la médula ósea. Se debe a anemias, hemorragias, o hemólisis (rotura de hematíes) por diversas causas.
- Los leptocitos son células delgadas que cuentan con una membrana celular grande observadas en enfermedades crónicas debilitantes que producen anemia.
- Los estomatocitos son eritrocitos con una forma oval hacia el centro que se observa en enfermedades hepáticas.
- Los dianocitos: células en forma de diana que pueden verse en talasemias o anemias ferropénicas severas.
- Punteado basófilo: puede indicar intoxicación por plomo (saturnismo) u otros metales pesados, anemias hemolíticas, talasemias y algunas leucemias.
- Los cuerpos de Howell-Jolly, son manchas nucleares observadas frecuentemente como consecuencia de un estado anémico en procesos regenerativos, no obstante, si son numerosos pueden indicar problemas en el bazo.
- Los cuerpos de Heinz son estructuras localizadas en la membrana eritrocítica producto de la desnaturalización de la hemoglobina causada por la acción oxidante de ciertas drogas o químicos.
Los glóbulos blancos o leucocitos tienen diferentes tipos con características muy específicas.
Algunos hallazgos anormales son:
- Granulocitos en los neutrófilos en ciertas infecciones y cáncer.
- Bastones de Auer: en ciertos tipos de leucemia.
- Anomalía de Pelger-Huët: Alteraciones del núcleo de la célula que pueden indicar presencia de cáncer o acompañar anemias muy graves.
- Virocitos: Linfocitos aumentados de tamaño que pueden indicar una mononucleosis infecciosa.
- Sombras de Gümprecht: Restos de linfocitos que se rompen al extender la sangre y que aparecen en cierto tipo de leucemias.
Las plaquetas se observan como pequeños trozos alrededor de los glóbulos rojos y blancos.
Algunos hallazgos anormales son:
- Satelitismo plaquetario y agregados plaquetarios: Aparece una falsa disminución en el número total de plaquetas realizado por la máquina automática porque las plaquetas se pegan a los glóbulos blancos o se apelmazan. No implican enfermedad.
- Macrotrombocitos: Son plaquetas muy grandes o acumulación de plaquetas que se ven como una sola, por ejemplo, en el síndrome de Bernard-Soulier Microtrombocitos: plaquetas muy pequeñas relacionadas con el Síndrome de Wiskott-Aldrich y otras enfermedades genéticas.
Fernando Martínez Sáez
Redactor y divulgador de temas científicos, médicos y sanitarios. Miembro de la Asociación Nacional de Informadores de Salud.
Autor originalDra. Yolanda Patricia Gómez González
Especialista en Medicina general y licenciada en medicina por la universidad nacional de Colombia.
Revisor clínico